¿Te sientes hinchada?

Este es uno de los temas más tratados en consulta, siendo fuente de confusión y frustración para muchas personas, pero antes de ahondar en el tema tenemos que saber porqué se produce la retención de líquidos.

Como ya sabemos, nuestro principal elemento en el cuerpo es el agua, entre un 50 y 60 % del total de nuestro peso, siendo mayor en el caso de los hombres.

Para comprender un poco mejor esto, debemos hacer dos distinciones importantes. Por un lado, se encuentra el líquido intracelular que es el que se encuentra en el interior de las células y por otro, el líquido extracelular que se encuentra fuera de las mismas. El cuerpo tiene mecanismos que regulan y mantienen el equilibrio de agua en los diferentes compartimentos, pero cuando este equilibrio se rompe se produce un exceso de fluido en los tejidos, lo que llamamos comúnmente retención de líquidos.

Posibles causas:

• Poca ingesta de agua: la deshidratación hace que se acumulen líquidos.
• Dieta deficitaria en nutrientes: una dieta poco balanceada puede causar déficit de minerales, hemos de prestar especial atención al magnesio y potasio.
• Exceso de carbohidratos: cada gramo de carbohidratos retiene 4 gr de agua. Una dieta alta en carbohidratos hará que retengamos líquidos, especialmente si se trata de CH simples como harinas refinadas y azúcar.
• Sodio: cada gramo de sodio retiene hasta 5 gr de agua. 
• Ingesta de medicamentos: tales como corticoesteroides, antiinflamatorios no esteroideos o fármacos para la tensión arterial. 
• Cambios hormonales: estos casos suelen suceder más en mujeres, ya que estamos más expuestas a dichos cambios como en la ovulación o embarazo.
• Movilidad: pasar muchas horas de pie o sentado, o seguir un estilo de vida sedentario son otras de las causas que incrementan la retención de líquidos.
• Otros factores a tener en cuenta: problemas en el sistema linfático o renal, alteración en la tiroides (hiper o hipotiroidismo), enfermedades derivadas del corazón e hígado, enfermedad intestinal que dificulte la absorción de minerales o genere inflamación entre otros, e incluso intolerancias como la intolerancia al gluten, podría ser otra de las causas de esta retención.

Consejos para evitar la retención de líquidos.

• Dieta rica en potasio. Los minerales en general son muy importantes, aunque cabe resaltar la función del potasio, ya que este mineral regula los niveles de de agua en el organismo.
• Es importante mantener unos buenos niveles de hidratación. Hay que tener en cuenta que el agua nos ayuda a depurar el organismo para eliminar las toxinas y restablece el equilibrio hídrico. Hay que recordar que hay bebidas como el café, el té y el alcohol las cuales nos deshidratan; por tanto la bebida por excelencia debería ser el agua. Uno de los trucos que recomendamos a aquellos que os cuesta beber agua, es que empleéis infusiones o caldos de verduras o huesos con poca sal. 
• Condimentar nuestros platos con hierbas aromáticas y especias, evitando o reduciendo el consumo de alimentos procesados, ya que son muy ricos en sal.
• Entrenar sin sobreentrenar. Cuando abusamos del ejercicio pueden aumentar los niveles de estrógeno y  bajar progesterona y testosterona, por lo que puede darse una sobreproducción de hormonas adrenales; esto se soluciona simplemente entrenando de  4 a 5 veces por semana, nunca más de dos horas y escuchando a nuestro cuerpo. Cuando el organismo os indique que hay que descansar, ¡hacedle caso!.
• Estar en movimiento. Subir escaleras, caminar hacia el trabajo, practicar hobbies como bailar, nadar o patinar, ¡todo suma!.
• Existen además otros recursos como medias elásticas que ejercen presión sobre los vasos sanguíneos.

En nuestro siguiente artículo, ahondaremos en este tema abordando la suplementación para la retención de líquidos y su efectividad, e incluiremos pautas dietéticas y un menú semanal con ideas para combatir la retención de líquidos.

¡Nos vemos pronto equipo!

Victoria Castillo